World Nomad Games Opening Ceremony: A Fusion of the Ancient and the Modern
Images: TCA, Stephen M. Bland
With much pageantry, August 8 saw Astana host the opening ceremony of the 5th World Nomad Games, themed as the “Gathering of the Great Steppe.” A procession of singers and dancers in tall white telpek hats and flowing red and gold robes opened proceedings, marrying modern beats to traditional music. This fusion of the ancient and the present was a key theme running through the entire event.
With the melodies building to crescendo, the flag-waving crowd lifted their torches aloft, chanting “Kazakhstan,” before the national anthem peeled out from the stage.
With 89 countries participating in this edition, the parade of athletes followed, each nation led forth by a white steed and a woman in a traditional, sparkling costume. From the hundreds representing the Kyrgyz Republic – a perennial champion at the World Nomad Games – to far smaller contingents, such as the three representatives from Benin, each nation was afforded their moment in the spotlight. Last, but far from least, the athletes from Kazakhstan emerged to a huge roar of appreciation.
Taking to the podium with the keynote address, President Tokayev told the crowd Kazakhstan is “known to everyone as a land of peace and coexistence. The games, he stated, are a “great event on a global scale… Nomadic civilization has left a deep mark on world history. The new technologies they developed provided the impetus for global progress. Five thousand years ago, nomads domesticated the horse and shaped a horseback riding culture that spread across the world… Serving as a bridge between East and West, nomads played a crucial role in the rapprochement of various cultures.
“The great nomadic life will never cease to exist,” Tokayev concluded. “Even amid globalization, the nomadic lifestyle that existed for a thousand years is reviving and taking a new shape. Modern nomads are making efforts to reclaim a central place in history. We are moving and traveling easily all over the world in search of education and job opportunities.”
First Deputy Prime Minister, Roman Skylar took the opportunity to emphasize that in the wake of unprecedented floods, the nation had grasped this moment to show “resilience in our commitment to our traditions.” Respect and solidarity were at the core of his address, whilst without naming specific conflicts which continue to cast a long shadow over the region, Skylar stated that there can be “no peace without unity.”
Specifically mentioning the conflict in Gaza, the son of Turkey’s President, Bilal Erdogan, President of the World Ethnosport Confederation echoed these sentiments, remarking that the games represent the “bonds of unity that the world needs today more than ever.”
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Also in attendance at the event hosted by President Tokayev were the President Mirziyoyev of Uzbekistan, President Japarov of the Kyrgyz Republic, Gurbanguly Berdymuhamedow, the Chairman of the People’s Council of Turkmenistan, the Rais (Head) of Tatarstan, Rustam Minnikhanov, and the Head of the Republic of Sakha (Yakutia), Aisen Nikolayev.
Dazzling visuals marked the end of the ceremony, as trapeze artists pirouetted through the air, Dimash Qudaibergen serenaded the audience, and wolves, camels and eagles took center stage.
Stephen M. Bland
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Ceremonia de apertura de los Juegos Nómadas Mundiales: una fusión de lo antiguo y lo moderno
Imágenes: TCA, Stephen M. Bland El 8 de agosto, Astana fue sede de la ceremonia de apertura de los 5º Juegos Nómadas Mundiales, cuyo tema fue la “Reunión de la Gran Estepa”.
Una procesión de cantantes y bailarines con altos sombreros blancos telpek y túnicas sueltas rojas y doradas abrió el evento, combinando ritmos modernos con música tradicional.
Esta fusión de lo antiguo y lo actual fue un tema clave que se repitió durante todo el evento.
Con las melodías creciendo hasta llegar al crescendo, la multitud que ondeaba banderas levantó sus antorchas en lo alto, cantando “Kazajstán”, antes de que el himno nacional comenzara a sonar desde el escenario.
Con 89 países participantes en esta edición, siguió el desfile de atletas, cada nación liderada por un corcel blanco y una mujer con un traje tradicional brillante.
Desde los cientos de representantes de la República Kirguisa (campeona perenne de los Juegos Nómadas Mundiales) hasta contingentes mucho más pequeños, como los tres representantes de Benín, cada nación tuvo su momento de protagonismo.
Por último, pero no por ello menos importante, los atletas de Kazajstán aparecieron entre un gran rugido de aprecio.
Al subir al podio con el discurso inaugural, el presidente Tokayev dijo a la multitud que Kazajstán es «conocido por todos como una tierra de paz y coexistencia».
Los juegos, afirmó, son un «gran evento a escala mundial… La civilización nómada ha dejado una profunda huella en la historia mundial.
Las nuevas tecnologías que desarrollaron proporcionaron el impulso para el progreso global.
Hace cinco mil años, los nómadas domesticaron el caballo y dieron forma a una cultura de la equitación que se extendió por todo el mundo… Al servir de puente entre Oriente y Occidente, los nómadas desempeñaron un papel crucial en el acercamiento de varias culturas.
«La gran vida nómada nunca dejará de existir», concluyó Tokayev. “Incluso en medio de la globalización, el estilo de vida nómada que existió durante mil años está reviviendo y tomando una nueva forma.
Los nómadas modernos están haciendo esfuerzos por recuperar un lugar central en la historia. Nos estamos moviendo y viajando fácilmente por todo el mundo en busca de oportunidades de educación y trabajo”.
El Primer Viceprimer Ministro, Roman Skylar, aprovechó la oportunidad para enfatizar que, tras las inundaciones sin precedentes, la nación había aprovechado este momento para mostrar “resiliencia en nuestro compromiso con nuestras tradiciones”.
El respeto y la solidaridad fueron el núcleo de su discurso, mientras que sin nombrar conflictos específicos que siguen proyectando una larga sombra sobre la región, Skylar afirmó que no puede haber “paz sin unidad”.
Mencionando específicamente el conflicto en Gaza, el hijo del Presidente de Turquía, Bilal Erdogan, Presidente de la Confederación Mundial de Etnodeporte se hizo eco de estos sentimientos, señalando que los juegos representan los “lazos de unidad que el mundo necesita hoy más que nunca”.
En el acto organizado por el presidente Tokayev también estuvieron presentes el presidente de Uzbekistán, Mirziyoyev; el presidente de la República Kirguisa, Japarov; el presidente del Consejo Popular de Turkmenistán, el Rais (jefe) de Tartaristán, Rustam Minnikhanov; y el jefe de la República de Sakha (Yakutia), Aisen Nikolayev.
La ceremonia concluyó con espectaculares imágenes: trapecistas hicieron piruetas en el aire, Dimash Qudaibergen cantó una serenata al público y lobos, camellos y águilas ocuparon el centro del escenario.
Stephen M. Bland Stephen M. Bland
8 septiembre 2024.-
